“—¿Qué quieres que haga por ti? —preguntó Jesús. —Mi Rabí—dijo el hombre ciego—, ¡quiero ver!”. Marcos 10:51 (NTV)
Cuando Dios te da una meta, debes hacerla pública. Debes anunciar tu intención. Hablar del cambio que deseas hacer en tu vida. Explicar lo que te está pidiendo Dios que hagas. Tienes que decirle a todo el mundo, porque una fe secreta es una fe superficial.
Ayer, vimos la historia de Bartimeo, un hombre que era ciego y se encontró inesperadamente con Jesús. Cuando se dio cuenta de que Jesús estaba cerca, gritó para llamar su atención. Demostró su fe públicamente.
Marcos 10:51 registra la respuesta de Jesús: “—¿Qué quieres que haga por ti? —preguntó Jesús. —Mi Rabí—dijo el hombre ciego—, ¡quiero ver!” (NTV).
¿Por qué hizo Jesús esta pregunta en particular? Seguramente él ya sabía lo que el hombre necesitaba. El hombre era ciego, una condición que, en ese tiempo y cultura, lo convirtió en un paria con pocas opciones más que pasar sus días mendigando.
Aun así, Jesús se acercó al hombre y le preguntó: “¿Qué quieres que haga por ti?” ¿No sabía ya lo que necesitaba Bartimeo? ¿No podía leer su mente, o simplemente ver la necesidad obvia del hombre? Absolutamente sí.
Pero Jesús hizo la pregunta para beneficio de Bartimeo. Al hacer esa pregunta, permitió que Bartimeo anunciara públicamente su fe. Bartimeo dijo: “Quiero ver” Marcos 10:51 (NTV). En otras palabras, Bartimeo quería que Jesús lo sanara.
No le pides a Jesús que te sane a menos que creas que puede hacerlo. Bartimeo creía que Jesús era quien decía ser, que Jesús podía cambiarlo y lo cambiaría. Fue una declaración de fe.
Aquí está lo asombroso. Jesús te hace la misma pregunta: “¿Qué quieres que haga por ti?” Lo pregunta todos los días.
Dios quiere usarte. Él quiere bendecirte. Él quiere hacer cosas increíbles en tu vida. Pero cuando Jesús pregunta qué puede hacer por ti, tienes que responder con fe.
¿Cómo puedes responder con fe? Una forma es establecer una meta. Cada vez que estableces una meta, en realidad es una declaración de fe.
También debes anunciar tu objetivo públicamente. Cuanta más gente sepa, más apoyo, aliento, oración y responsabilidad tendrás. Un anuncio público también demuestra la profundidad de tu fe; si quieres hacer un cambio importante en tu vida y te lo guardas para ti, tu fe es simplemente superficial.
Al anunciar tu meta, recuerda que solo Dios conoce el futuro. Así que cuando digas: “Voy a hacer esto”, recuerda agregar la frase “si es la voluntad de Dios”.
Cuando Jesús te pregunta: “¿Qué quieres que haga por ti?” debes estar listo con tu respuesta. Y luego prepárate para compartirlo públicamente con fe.
Reflexiona sobre esto:
“Dejen que el Espíritu les renueve los pensamientos y las actitudes”. Efesios 4:23 (NTV) El…
The movie Rudy tells the story of Daniel “Rudy” Ruettiger, whose only dream was to…
“Desháganse de su vieja naturaleza pecaminosa y de su antigua manera de vivir, que está…
Light diffused has no power at all. But focused light through a magnifying glass can…
“Ya que han oído sobre Jesús y han conocido la verdad que procede de él,…
The person who faithfully endures the marathon of life is someone who has chosen to…