“Si necesitan sabiduría, pídansela a nuestro generoso Dios, y él se la dará. . . Cuando se la pidan, asegúrense de que su fe sea solamente en Dios, y no duden” (Santiago 1:5-6 NTV).

Dado que Dios concibió en su totalidad el concepto de las relaciones entre hombres y mujeres, padres e hijos, y amigos, ¿no hace sentido acudir a Él por su guía cuando tienes un problema?

Tal como dice el versículo de hoy, “Si necesitan sabiduría, pídansela a nuestro generoso Dios, y él se la dará. . . Cuando se la pidan, asegúrense de que su fe sea solamente en Dios, y no duden” (Santiago 1:5 NVI).

¿Por qué tenemos que pedir antes que Él responda? Porque nuestra relación con Dios comienza con la fe. Él no fuerza nada en nosotros. Él nos invita a una relación con Él. Entonces pedimos.

Ahora debo decir, demasiadas veces me olvido de pedir. Si eres como yo, simplemente estás corriendo todo el día haciendo esto, haciendo aquello, asumiendo que todo va a estar bien. Pero necesitas detenerte cada tanto y decir, “Dios, te lo pido, ¿cuál es tu indicación?” Él te lo dirá con gusto.

¿Y cómo te lo dice? Una respuesta usualmente vendrá principalmente por uno de dos caminos: a través de personas que le siguen y a través de Su Palabra. Reúnete con algunas pocas personas que sepas que buscan de Dios, y pídeles su opinión. Mira en sus ojos, y obtiene una respuesta honesta. Y, acude a la Palabra de Dios. Pregúntale, “Dios, ¿qué tienes para decirme sobre esto?”

Algunas personas piensan que Dios no está interesado en nuestras relaciones. Después de todo, Él tiene todo un universo que mantener funcionando. Pero Él está interesado. ¡Él te creó! La Biblia dice, “Cada uno debería seguir viviendo en la situación que el Señor lo haya puesto, y permanecer tal como estaba cuando Dios lo llamó por primera vez” (1 Corintios 7:17 NTV).

Comprendo las heridas que pueden existir en algunas relaciones, pero la increíble promesa de la Palabra de Dios es que Él puede traer gracia a cualquier relación—no perfección, pero Él puede traer gracia. Ambas personas en la relación tienen que estar de acuerdo, y llevará algo de esfuerzo llegar allí. Pero no existe el rendirse en el plan o el propósito de Dios. Por eso es que debes acudir a Él por guía y consejo.

Reflexiona sobre esto:

• ¿Qué necesitas hacer para asegurarte de tener tiempo cada día para pasar con Dios de modo que no olvides buscar de su guía?
• ¿Cómo puedes desarrollar el tipo de amistades con otros cristianos que te ayuden a buscar y seguir la guía de Dios?
• ¿Por qué hace diferencia que creas que Dios puede restaurar gracia en tu relación?