Primeros Cinco Pasos para Construir una Vida de Amor
por Rick Warren — Febrero 27, 2021
He estado en esta tierra por un tiempo ya, y todavía estoy convencido por Dios de lo poco que realmente sé acerca del amor y con qué frecuencia me encuentro actuando como una persona sin amor. Aquí están unos cuantos pasos que te ayudarán a trabajar en esta área. Todos tenemos mucho que hacer para madurar en el amor de Dios.
Entonces, ¿cómo construir una vida de amor profundo y verdadero? Esa es una pregunta importante, y pasarás el resto de tu vida tratando de contestarla. Pero puedo darte algunos pasos para empezar – cinco cosas que puedes hacer esta semana que te ayudarán a convertirte en una verdadera persona de amor, a lo largo del camino.
- Aprende cómo actúa y responde el amor maduro.
El cambio personal siempre comienza con un cambio de perspectiva. Necesitas tener la perspectiva de Dios sobre cómo es realmente el amor, porque el mundo no sabe nada sobre el amor real y profundo. Lo haces entrando en la Palabra de Dios.
- Empieza tu día con un recordatorio diario de amar.
Los primeros 10 minutos del día establecen tu estado de ánimo para el resto del día. Resuelve levantarte por la mañana y decir: “Dios, ayúdame a recordar que lo más importante es amarte a ti y amar a los demás”. Si hoy no hago nada más que amarte a ti y a las personas que me rodean, no ha sido un día perdido”.
- Memoriza lo que Dios dice sobre el amor.
La Palabra de Dios está llena de verdades y principios sobre cómo convertirte en una persona amorosa. El problema es que cuando estás en una situación en la que estás tentado a no amar, tu Biblia está normalmente en casa en un estante. Por eso necesitas memorizar las Escrituras —para que Dios pueda traer versículos a tu mente cuando más los necesites.
- Practica el actuar de manera desinteresada y amorosa.
El amor es como un músculo. Cuanto más lo usas, más se desarrolla. Si quieres convertirte en una persona verdaderamente amorosa, tienes que hacer intencionalmente algunas cosas que parecen incómodas al principio. Pero cuanto más practicas, más se convierte en algo natural, y te conviertes en una persona genuinamente amorosa.
- Obtener el apoyo de otras personas amorosas.
Si sólo estás sentado en tu habitación y leyendo un libro, no vas a llegar muy lejos en el aprendizaje de cómo amar. Sólo lo aprendes en conexión con otros, en el contexto de la comunidad. ¡Esa es una de las razones por las que un grupo pequeño es tan importante! Te pone en situaciones en las que puedes crecer al ver el amor divino modelado para ti y al practicar el servicio a los demás de forma desinteresada y amorosa.
Nunca aprendes a amar sentándote y escuchando. Lo aprendes en relación con otras personas.
Reflexiona sobre esto:
- ¿Qué podrías cambiar en tu horario para que puedas darle a Dios la mejor parte de tu día y comenzar tu día en su Palabra?
- Piensa en los distintos métodos con los que aprendiste en la escuela. ¿Cómo puedes aplicar algunos de esos mismos métodos para memorizar la Escritura?
- ¿Qué personas en tu vida han modelado una vida de amor? ¿De qué maneras específicas aman a Dios y a los demás?