Por Jesús, Vale la Pena el Viaje
por Rick Warren — Diciembre 27, 2021
La búsqueda de la verdad no es un trabajo de medio tiempo. Toma todo lo que tienes. Los Sabios de Oriente nos enseñan esto en la historia de la Navidad.
Los Sabios del Oriente estaban dispuestos a ir a cualquier distancia para encontrar la verdad. Mateo 2:1 dice: “Jesús nació en Belén de Judea… Después de su nacimiento, llegaron a Jerusalén unos sabios del oriente“ (PDT). Podemos suponer que los Sabios del Oriente viajaron muchas millas desde el Lejano Oriente al Oriente Medio a un gran costo para encontrar a Jesús.
Jesús nació en Belén, que está a sólo seis millas de Jerusalén. En el momento del nacimiento de Jesús, Jerusalén era el centro espiritual del mundo. Todo tipo de actividad espiritual se llevaba a cabo en Jerusalén. Todos los principales líderes religiosos del mundo se encontraban en Jerusalén, pero ninguno de ellos estaba buscando a Jesús. Sólo las personas en el exterior —los Sabios de una cultura completamente diferente— estaban buscando a Jesús.
El rey Herodes no vio al niño Jesús. Lo mismo ocurrió con los empresarios de Belén. Tú también puedes tener a Jesús frente a ti y aún así no verlo si no lo buscas.
Pero los Sabios del Oriente buscaron a Jesús. Estaban dispuestos a hacer un viaje de cuatro o cinco meses a través de un desierto abrasador para encontrar a Jesús. Ellos tomaron muy en serio la búsqueda de Dios. Estaban dispuestos a hacer lo que fuera necesario para encontrarlo.
Eso es sabio. Es lo que nosotros tenemos que hacer también. No puedes dejar que nada se interponga en tu búsqueda de Dios. Es lo más importante que puedes hacer en tu vida.
Jesús dijo que el Reino de los Cielos es como una perla que es tan valiosa que venderíamos todo lo que tenemos para obtenerla. Parece que los Sabios del Oriente lo entendieron mucho antes de que Jesús lo hablara en una parábola.
Los Sabios de Oriente estaban dispuestos a renunciar a todo lo que tenían para adorar a Jesús. Ellos estaban dispuestos a renunciar a la comodidad de sus hogares por un largo y duro viaje, porque tenían el motivo correcto para buscar a Jesús. Querían adorarlo.
¿A qué renunciarías para adorar a Jesús?
Reflexiona sobre esto:
- ¿Qué es lo más difícil que tendrías que renunciar en tu vida para buscar a Jesús de todo corazón?
- ¿Qué te detiene de buscar a Jesús completamente?
- ¿Qué hace que una relación con Jesús sea tan valiosa que valga la pena renunciar a todo?