“El necio da rienda suelta a su ira, pero el sabio sabe dominarla”. Proverbios 29:11 (NVI)
Muchas personas piensan que la ira es pecado, pero eso no es cierto.
La ira sólo se convierte en pecado cuando es expresado de una manera inapropiada.
A veces la respuesta más apropiada para una situación es la ira. Incluso, puede ser una expresión de amor. De hecho, la Biblia dice que Dios se enfurece de manera justa, y la única razón por la que puedes experimentar ira es porque has sido creado a Su imagen.
Pero sí existe la ira como pecado. Esto es cuando explotamos o nos la guardamos. Es cuando amenazamos, insultamos, o humillamos a alguien.
Mientras que la ira sin manejar es un pecado, la ira controlada es una ganancia porque te da una imagen clara de la situación y te permite responder con el amor de Dios —aun cuando te han tratado injustamente.
Porque Dios está contigo y no en tu contra, Él te da la habilidad de escoger cómo manejar tu ira. Con el Espíritu Santo trabajando en ti, la puedes controlar.
Te has encontrado alguna vez en una acalorada discusión en tu hogar, y el teléfono sonó y contestaste dulcemente diciendo, “Hola”. ¿Qué acaba de suceder? Tú pudiste cambiar el tono de voz instantáneamente, porque así lo quisiste.
Proverbios 29:11 dice, “Los necios dan rienda suelta a su enojo, pero los sabios calladamente lo controlan” (NTV).
Decidir tener ira es justamente eso —una decisión. Tú probablemente has dicho en algún momento, “¡Me haces enojar mucho!” Pero nadie puede controlar tus emociones sin tu permiso. Tú puedes decidir de antemano cómo responderás y controlar tu ira.
Tu relación con Cristo determinará cuán bien dominas la ira en tu vida. Aun en medio de una crisis, en la más difícil de las situaciones, puedes controlar tu ira con el amor de Dios dentro de ti.
Y cuando la ira se controla sabia y apropiadamente, produce grandiosos matrimonios, grandiosas relaciones de amistad, grandes negocios, grandes líderes y gran progreso.
Reflexiona sobre esto:
“Nunca dejen de ser diligentes; antes bien, sirvan al Señor con el fervor que da…
I don’t know what your next step is, but I do know this: You have…
“No finjan amar a los demás; ámenlos de verdad. Aborrezcan lo malo. Aférrense a lo…
Setting a big goal can be exciting at first—and overwhelming. In fact, looking at a…
“Así como nuestro cuerpo tiene muchas partes y cada parte tiene una función específica, el…
The Bible tells the story of a blind man named Bartimaeus. One day, as Jesus…