Elige el Dolor a Corto Plazo para Obtener Beneficios a Largo Plazo

“[Moisés] Prefirió ser maltratado con el pueblo de Dios a disfrutar de los efímeros placeres del pecado” (Hebreos 11:25 NVI).

Ayer aprendimos que, para ser todo lo que Dios quiere que seamos, tenemos que tomar la primera resolución: “Decido que no voy a permitir que otras personas me presionen a su manera. Voy a ser lo que Dios quiere que sea. Voy a hacer lo que Dios quiere que haga y voy a cumplir el plan que Dios tiene para mi vida, no el plan de alguien más para mi vida”.

Ahora, la segunda resolución que necesitas hacer es esta: Elige el dolor a corto plazo para obtener beneficios a largo plazo.

Cualquiera que ha jugado alguna vez algún deporte sabe de esto. Tienes que practicar y trabajar duro para lograr jugar un partido de campeonato. No solo sales a caminar y ganas el campeonato. Si vas a ser bueno en cualquier cosa, tienes que aceptar el dolor temporal a cambio de una ganancia duradera.

No sólo es verdad en los deportes. Es verdad en las finanzas. Y es verdad en las relaciones. Tengo un buen matrimonio, pero Kay y yo hemos trabajado duro en ello por años. No se da fácil. Tienes que trabajar para que prospere tu matrimonio, al igual que cualquier otra cosa en la vida.

¿Por qué tienes que hacer esta importante resolución en tu vida? Porque la mayoría de los problemas en la vida vienen de la incapacidad para retrasar la gratificación. Todo en la sociedad nos enseña a decir, “Yo quiero todo y lo quiero ahora y lo quiero gratis y fácil”. ¡La vida no funciona así!

Moisés hizo una elección: “Prefirió ser maltratado con el pueblo de Dios a disfrutar de los efímeros placeres del pecado” (Hebreos 11:25 NVI).

Quiere decir que él prefirió ser maltratado –soportar el dolor temporal por una ganancia duradera al hacer lo correcto.

Vas a tener dolor en tu vida. Pero si eliges hacer las cosas difíciles ahora y pones el esfuerzo y la disciplina para aprender, para crecer, para ser fuerte y maduro, entonces después en la vida tendrás el beneficio de todo eso.

Me estoy beneficiando justo ahora de las decisiones que hice en mis 20s de no gastar más de lo que ganaba, de ahorrar, de diezmar, de honrar a Dios. Me estoy beneficiando muchos años después porque fui disciplinado. Hice lo difícil primero.

Cuando eliges el dolor temporal como lo hizo Moisés, vas a ver a Dios cumplirte lo prometido para que puedas disfrutar de tu recompensa duradera.

Reflexiona sobre esto:

  • ¿Qué dolor temporal estás enfrentando que requiere una perspectiva eterna?
  • ¿Cómo has visto las decisiones difíciles que has hecho o las largas horas que has puesto en tu beneficio para el largo plazo?
  • ¿Por qué crees que Dios quiere que elijas la forma difícil ahora, incluso si eso significa que tienes que sufrir o soportar las dificultades?

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