El Gran Regalo de Dios no se Envuelve de forma Tradicional

“Dios, por su generoso amor, aprueba a todos gratuitamente. Es un regalo de Dios hecho posible porque Jesucristo hizo lo necesario para liberarnos del pecado. Dios ofreció a Jesucristo para hacer posible, por medio de su muerte, el perdón de los pecados. El perdón se recibe a través de la fe. Él ofreció a Jesucristo como sacrificio para demostrar que él siempre es justo en lo que hace. Lo demostró en el pasado cuando en su paciencia pasó por alto los pecados de muchos, y también ahora al aprobar a todo aquel que confía en Jesús”.  Romanos 3:24-25 (PDT)

El regalo más grande que alguien pudo haber dado no fue comprado en una tienda. No hubo intercambio de dinero. Ni siquiera fue envuelto de forma tradicional —en cambio, este regalo fue envuelto en cobijas que abrigan y puesto en un pesebre.

Aun así, le costó todo al dador.

La Biblia dice que Dios envió a su Hijo a la tierra como el más grande regalo jamás dado. Él vino a reconciliarte con Dios. Romanos 3:24-25 dice, “Dios, por su generoso amor, aprueba a todos gratuitamente. Es un regalo de Dios hecho posible porque Jesucristo hizo lo necesario para liberarnos del pecado. Dios ofreció a Jesucristo para hacer posible, por medio de su muerte, el perdón de los pecados. El perdón se recibe a través de la fe. Él ofreció a Jesucristo como sacrificio para demostrar que él siempre es justo en lo que hace. Lo demostró en el pasado cuando en su paciencia pasó por alto los pecados de muchos, y también ahora al aprobar a todo aquel que confía en Jesús” (PDT).

Así que, ¿Por qué tuvo que morir Jesús? Regresemos a los fundamentos.

  • Nadie es perfecto. Nunca he encontrado a una persona perfecta, ni tampoco tú. No cumplo mis propias expectativas, mucho menos el estándar perfecto de Dios –y tampoco tú. Todos nos hemos equivocado. La Biblia dice, “Es así porque todos hemos pecado y no tenemos derecho a gozar de la gloria de Dios” Romanos 3:23 (NBV).
  • Dios es justo. Dios quiere ser justo. Cuando alguien rompe la ley, debe haber una consecuencia de ello. Cuando rompes la ley de los hombres, pagas la multa que imponen los hombres. Cuando rompes la ley de Dios, pagas la multa de Dios. La Biblia dice, “Porque si bien la paga del pecado es muerte, el regalo que nos da Dios es vida eterna a través de Jesucristo nuestro Señor” Romanos 6:23 (NBV).
  • Jesús pagó el precio de nuestros pecados. La Biblia dice, “Cristo nunca pecó. Pero Dios lo trató como si hubiera pecado, para declararnos inocentes por medio de Cristo” 2 Corintios 5:21 (TLA). Jesús tomó sobre sí mis pecados y tus pecados y todos los pecados que han sido cometidos. Esas son las Buenas Nuevas, el Evangelio. Jesús pagó el precio que nunca podrías pagar.
  • Acepta el regalo gratuito de Dios. Dios nos ofrece el regalo gratuito de la salvación porque Jesús tomó sobre sí nuestros pecados —pero es un regalo que debemos elegir recibir. La Biblia dice, “Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios” Juan 1:12 (NVI).

Si no has aceptado el regalo gratuito de la salvación de parte de Dios, oro para que hagas esa decisión hoy. Una cosa es entender los fundamentos de como tener una relación con Jesús. Y otra cosa es aceptar el regalo.

Y si ya has hecho esa decisión, oro que compartas las Buenas Nuevas de Jesús con alguien que necesite escucharla.

Reflexiona sobre esto:

  • Fuera de tu salvación, ¿Qué otro regalo memorable has recibido?
  • ¿Por qué es difícil aceptar gratis un regalo tan valioso?
  • ¿A qué persona puedes hablarle esta semana sobre el regalo gratuito de la salvación?

¿Le has confiado a Jesús tu salvación?

La Biblia dice que solo podemos ir al cielo si confiamos en Dios a través de su Hijo, Jesucristo. Y no tenemos que ganar el amor de Dios o ganarnos el camino al cielo a nuestra manera. La Biblia dice, “Porque por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe; esto no procede de ustedes, sino que es el regalo de Dios, no por obras, para que nadie se jacte” Efesios 2:8-9 (NVI).

Si no has confiado en Jesús, ni has hecho el compromiso de seguirlo, ¿Por qué esperar más? Si estás listo para dar ese paso y tomar la decisión de creer en Jesucristo y seguirlo, haz esta oración:

“Querido Jesús, tú has prometido que si yo creo en ti, todo lo que he hecho mal será perdonado, aprenderé el propósito de mi vida, y me aceptarás en tu hogar eterno en el cielo un día”.

“Confieso mis pecados y creo que eres mi salvador. Has prometido que si confieso mi pecado y confío en ti, seré salvo. Confío en ti, cuando dices que la salvación es por gracia, a través de la fe, y de ninguna otra manera. Te recibo en mi vida como mi Señor. Hoy entrego cada parte de mi vida bajo tu control. Tienes el derecho de dirigir mi vida”.

“Jesús, quiero descansar en tu amor. Te agradezco que no tengo que comprarlo ni ganarlo. Quiero usar el resto de mi vida para servirte en lugar de servirme a mí mismo. Humildemente entrego mi vida a ti y te pido que me salves y me aceptes en tu familia. Hago esta oración en tu nombre. Amén”.

Si acabas de aceptar a Jesús, por favor envíame un correo electrónico a [email protected] y déjame saber. Me gustaría enviarte algunos materiales gratuitos para ayudarte a comenzar tu jornada con Jesús.


Comparte Esperanza Diaria con tus amigos.