Imagina que estás conduciendo por una montaña. El camino gira y gira, y estás atrapado detrás de un automóvil increíblemente lento. Piensas: “Si pudiera ver a la vuelta de la esquina, podría pasar este auto”. Luego, un helicóptero pasa volando y el piloto te dice en la radio: “Puedo ver dos millas más adelante. Está bien que pases”.

¿Cuál es la diferencia entre tú en el automóvil y el piloto en el helicóptero? La perspectiva.

El piloto tenía una perspectiva mucho más grande que tú. Así que él puede ayudarte a saber el próximo movimiento que debes hacer.

Tu relación con Dios es de la misma manera. Él tiene una perspectiva mucho más grande de tu vida que tú.

Dios quiere compartir su perspectiva contigo, y lo hace a través de la Biblia.

La perspectiva de Dios te ayuda a comprender el panorama general: las razones detrás de lo que hace y lo que sucede en el mundo.

Sin la perspectiva de Dios en tu vida, la vida puede estar llena de frustración constante. Te pasas el día haciendo preguntas que no puedes responder: ¿por qué me pasa esto a mí? ¿por qué le está sucediendo eso a otras personas? ¿cuál es el propósito de esto? ¿cuál es el significado de la vida?

Las respuestas a esas preguntas se encuentran en la perspectiva de Dios.

¿Alguna vez has tratado de hacer algo, pensando que funcionaría, pero descubriste que no? Te faltaba perspectiva.

Proverbios 14:12 dice: “Hay caminos que al hombre le parecen rectos, pero que acaban por ser caminos de muerte” (NVI).

Al ampliar tu perspectiva, te sales de tu propia forma de pensar y aprendes a pensar como Dios.

El Salmo 103:7 dice: “Dio a conocer sus caminos a Moisés; reveló sus obras al pueblo de Israel” (NVI). El pueblo de Israel vio lo que Dios hizo: la apertura del Mar Rojo, el maná, los milagros con agua y más.

Pero Dios dejó que Moisés entendiera el “por qué” detrás de lo que hizo. Le dio a Moisés Su perspectiva.

¿Cómo puedes obtener la perspectiva de Dios? Al estudiar la Palabra de Dios.

Reflexiona sobre esto:

• Para estudiar la Palabra de Dios, necesitas hacer más que solo leerla. Debes hacer preguntas y usar un bolígrafo y papel, o una nota en tu teléfono inteligente, para registrar lo que dice. Elige un capítulo de la Biblia hoy y estúdialo. Escribe lo que aprendes sobre la perspectiva de Dios.
• ¿Qué problema estás viendo desde tu propia perspectiva? Estudia la Palabra de Dios hoy para obtener la perspectiva de Dios sobre ella.
• Piensa en un momento en que Dios te ayudó a ganar Su perspectiva sobre una situación. Pasa tiempo en oración agradeciéndole por compartir Su perspectiva contigo.

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