Da el Siguiente Paso de Fe
por Rick Warren — Diciembre 20, 2023
No sé qué paso debes dar a continuación, pero sí sé que debes tomarlo.
Tu próximo paso puede ser aceptar a Jesucristo en tu vida o ser bautizado. Tal vez necesites unirte a una iglesia, formar parte de un grupo pequeño, diezmar, encontrar un ministerio, ir a un viaje misionero o invitar a un amigo a la iglesia.
No sé cuál es tu próximo paso, pero sí sé esto: tienes uno. Dios nunca terminará de llevarte más profundamente en la fe. Siempre hay un siguiente paso.
Si no das el siguiente paso, te quedarás estancado en una zanja. Y la única diferencia entre una tumba y una zanja es la longitud. Si no avanzas en la fe, morirás. Tu corazón se enfriará, y te sentirás más distante de Dios. Él no te va a ayudar con los pasos dos, tres, cuatro o cinco hasta que no des el paso uno.
Si le estás pidiendo a Dios que te ayude con algo, es posible que Él te esté preguntando: “¿Por qué no has hecho lo que ya te dije que hicieras?” Es posible que hayas estado planeando hacer algo. Deja de planificar y simplemente hazlo.
Durante los últimos días hemos aprendido de Bartimeo, un hombre que clamó a Jesús con fe, creyendo que Jesús podía sanarlo. Antes de que Bartimeo se encontrara con Jesús, estaba sentado junto al camino. Después de recibir la vista del Señor, “siguió a Jesús por el camino” Marcos 10:52 (NTV).
¿Cuál de estas dos frases describe tu vida: sentado al lado del camino o siguiendo a Jesús en el camino? ¿Cuál de estos dos estilos de vida crees que es más satisfactorio? ¿Cuál crees que ofrece más alegría, más significado y más satisfacción? ¿Cuál quieres que represente tu vida?
Solo hay una forma de seguir a Jesús en el camino: dar el siguiente paso.
La fe es más que creer. La fe es más que pensar, hablar o tener convicciones acerca de Jesús. La fe es acción. Es movimiento; es actividad La fe es algo que haces. De hecho, la Biblia dice en Santiago 2:14: “¿de qué le sirve a uno decir que tiene fe si no lo demuestra con sus acciones? ¿Puede esa clase de fe salvar a alguien?” (NTV).
¿De dónde sacas la fe para empezar de nuevo? Solo hay una fuente: Jesucristo.
“Dios los ha unido a ustedes con Cristo Jesús. Dios hizo que él fuera la sabiduría misma para nuestro beneficio. Cristo nos hizo justos ante Dios; nos hizo puros y santos y nos liberó del pecado” 1 Corintios 1:30 (NTV).
Bartimeo no tenía idea de que Jesucristo iba a pasar por su camino ese día. Para él, era solo otro día. Pero Dios le dio una oportunidad inesperada que le ofreció un nuevo comienzo.
Dios te está dando la misma oportunidad. No te demores. Da tu siguiente paso de fe antes de que se te pase la oportunidad.
Reflexiona sobre esto:
- ¿Estás sentado al lado del camino o sigues a Jesús en el camino hoy?
- ¿Qué estás esperando para dar el próximo paso de fe en tu vida? ¿Qué excusa has estado usando para procrastinar?
- ¿Qué “próximo paso” darás hoy para avanzar en la fe y seguir a Jesús?
Da el siguiente paso de salvación
¿Cuál es el siguiente paso en tu vida? ¿Si aceptar a Jesucristo en tu corazón es el siguiente paso? ¿Por qué esperar más?
No importa lo que hayas hecho o dónde hayas estado, tienes un lugar listo y esperándote en la familia eterna de Dios. La invitación está abierta. Solo cree y recibe.
¿Estás listo? Aquí hay una oración con la que puedes comenzar:
“Querido Dios, sé que cuando muera, te daré cuenta de mi vida. Sé que he pecado contra ti y he vivido según mi plan, no el tuyo. Quiero que eso cambie, comenzando ahora mismo. Quiero alejarme de mis pecados y volverme hacia ti.
Gracias por enviar a Jesús a morir por todo lo que he hecho mal, para no tener que pagar la condena. Sé que no merezco tu perdón. Sé que solo tu gracia puede salvarme, Señor. Nunca podría ser lo suficientemente bueno para entrar en un lugar perfecto.
Jesús, gracias por amarme tanto, que tomaste toda mi culpa sobre ti. Me hiciste aceptable para el Cielo, y humildemente te pido que me salves y me hagas parte de tu familia para siempre. Yo creo en ti, Jesús. Y creo que cumplirás tu promesa de salvarme de manera instantánea, completa y por toda la eternidad. En el nombre de Jesús. Amén”.