“Todo esto es la obra de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo y nos dio el encargo de anunciar la reconciliación. Es decir que, en Cristo, Dios estaba reconciliando consigo mismo al mundo, sin tomar en cuenta los pecados de los hombres; y a nosotros nos encargó que diéramos a conocer este mensaje. Así que somos embajadores de Cristo, lo cual es como si Dios mismo les rogara a ustedes por medio de nosotros. Así pues, en el nombre de Cristo les rogamos que acepten el reconciliarse con Dios”. 2 Corintios 5:18-20 (DHH)
En 1956, cinco misioneros estadounidenses se dirigieron a la selva tropical del este de Amazonas en Ecuador, en una segunda visita a la tribu Guaraní, que según los antropólogos era la sociedad más viciosa y violenta de la faz de la tierra. Tenían una cultura de matar, y los estudios mostraron que el 60 por ciento de la tribu murió por homicidio.
Después de que los misioneros salieron del avión, los miembros de la tribu los mataron a golpes. Los brutales asesinatos fueron noticia en todo el mundo y en la portada de las revistas Life, Time y Newsweek. Muchos periódicos informaron la muerte de estos hombres, incluidos Nate Saint y Jim Elliot.
Un par de años más tarde, la esposa y la hija de Jim, Elisabeth y Valerie Elliot, y la hermana de Nate, Rachel Saint, se mudaron a la aldea Guaraní para mostrar amor y perdón y ministrar a las personas que habían matado a su familia. Eventualmente, Mincaye, el líder de la tribu y los hombres que participaron en los asesinatos misioneros se convirtieron en cristianos.
El tipo de perdón que Elisabeth Elliot y Rachel Saint demostraron no tiene sentido hasta que Dios te haya perdonado. Una vez que lo experimentas, ¿cómo perdonas? Haces las cuatro cosas que estas mujeres hicieron:
Renuncias a tu derecho de venganza. Romanos 12:19 dice: “No tomen venganza, hermanos míos, sino dejen el castigo en las manos de Dios, porque está escrito: «Mía es la venganza; yo pagaré”, dice el Señor” (NVI). Déjalo en manos de Dios. Él se encargará de eso y manejará las cosas mucho mejor de lo que podrías hacerlo.
Responde al mal con el bien. ¿Cómo puedes saber cuándo has perdonado por completo a alguien? En realidad, puedes orar para que Dios bendiga a la persona que te lastimó. La Biblia dice: “Amen a sus enemigos, hagan bien a quienes los odian, bendigan a quienes los maldicen, oren por quienes los maltratan” Lucas 6:27-28 (NVI).
Repite estos pasos el tiempo que sea necesario. “Entonces Pedro fue y preguntó a Jesús: —Señor, ¿cuántas veces deberé perdonar a mi hermano, si me hace algo malo? ¿Hasta siete? Jesús le contestó: —No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete” Mateo 18:21-22 (DHH). A veces el perdón tiene que ser continuo.
Rescata a otros con las Buenas Nuevas del perdón de Dios. La Biblia dice en 2 Corintios 5:18-20, “Todo esto es la obra de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo y nos dio el encargo de anunciar la reconciliación. Es decir que, en Cristo, Dios estaba reconciliando consigo mismo al mundo, sin tomar en cuenta los pecados de los hombres; y a nosotros nos encargó que diéramos a conocer este mensaje. Así que somos embajadores de Cristo, lo cual es como si Dios mismo les rogara a ustedes por medio de nosotros. Así pues, en el nombre de Cristo les rogamos que acepten el reconciliarse con Dios” (DHH).
Reflexiona sobre esto:
“Ahora que saben estas cosas, Dios los bendecirá por hacerlas”. Juan 13:17 (NTV) Los vientos…
You need to plant by faith, not by your feelings. Do you think that every…
“Entonces ya no seremos inmaduros como los niños. No seremos arrastrados de un lado a…
Years ago PBS did a series of family histories of famous Americans. They wanted to…
“¡Tú guardarás en perfecta paz a todos los que confían en ti, a todos los…
To reap a great harvest, you must plant generously in faith. My wife Kay and…