Aquí hay seis preguntas que te ayudarán a discernir lo que Dios quiere que hagas:

Comprueba si es lo ideal: ¿Está en armonía con la Palabra de Dios? El Salmo 119:105 dice: “Tu palabra es una lámpara que guía mis pies y una luz para mi camino” (NTV).

Comprueba la integridad: ¿Quisiera que todos supieran de este paso que estoy a punto de dar? Proverbios 10:9 dice: “Las personas con integridad caminan seguras, pero las que toman caminos torcidos serán descubiertas” (NTV).

Comprueba si es para mejorar: ¿Me hará mejor persona? 1 Corintios 10:23 dice: «Todo está permitido», pero no todo es provechoso. «Todo está permitido», pero no todo es constructivo”.

Comprueba la independencia: ¿Podría convertirse en una adicción que controle y domine mi vida? 1 Corintios 6:12 dice: “Algunos de ustedes dicen: «Soy libre de hacer lo que yo quiera» ¡Claro que sí! Pero no todo lo que uno quiere, conviene; por eso no permito que nada me domine” (TLA).

Comprueba la influencia: ¿Perjudicará a otras personas? Romanos 14:13 dice: “propónganse vivir de tal manera que no causen tropiezo ni caída a otro creyente“ (NTV).

Comprueba la inversión: ¿Es el mejor uso de mi tiempo, y será el mejor uso de mi vida? Efesios 5:15-17 dice: “Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios, sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos. Por tanto, no sean insensatos, sino entiendan cuál es la voluntad del Señor” (NVI).