Alimenta tu Mente con la Palabra de Dios

 

“La gente no vive solo de pan, sino de cada palabra que sale de la boca de Dios” (Mateo 4:4 NTV).

Si quieres una mente sana, debes alimentar tu mente con verdad.

Todos sabemos la importancia de la nutrición. La buena comida y las buenas calorías te hacen más fuerte y saludable y te dan más energía. Las malas calorías y la comida chatarra perjudican tu cuerpo. Lo mismo es cierto en tu vida mental. Debes alimentar tu mente no con basura o veneno sino con la verdad.

Una vez tuve el privilegio de dar una conferencia en la Universidad de Oxford, y mientras estaba allí, me invitaron a una reunión de Analítica de la universidad. Este es un grupo del que probablemente nunca hayas escuchado y que tiene una enorme influencia en el mundo. Cada día, alrededor de las 6 a.m., los principales académicos de Oxford se reúnen en una sala para recibir informes de todo el mundo sobre lo que ha sucedido en las últimas 24 horas, desde el aumento de los precios de los cultivos en China hasta más disturbios en el Medio Oriente. Luego toman la decisión sobre lo que hay que decir al respecto. A las 11 a.m. entregan un informe a grupos que pagan mucho dinero por esta información, como la CIA y las principales corporaciones.

La Analítica de Oxford se basa en la idea de que los mejores líderes toman las mejores decisiones cuando tienen la mejor información. Incluso si eres un buen líder, si no tienes la mejor información, tomarás una mala decisión.

Necesitas la mejor información para vivir la mejor vida que Dios quiere que vivas. Esa información está ahí en la Palabra de Dios.

La Biblia dice en Mateo 4:4 que, “La gente no vive solo de pan, sino de cada palabra que sale de la boca de Dios” (Mateo 4:4 NTV).

Dios quiere que tomes las mejores decisiones y recibas lo mejor para tu vida. Lo haces alimentándote de la Palabra de Dios a lo largo de tu día, todos los días.

Reflexiona sobre esto:

• ¿Cuál es la parte más importante de tu rutina matutina? ¿Dónde está el estudio de la Palabra de Dios en tu rutina?
• ¿Cómo puedes incorporar el aprendizaje y la memorización de la Palabra de Dios en tu día laboral?
• ¿Cuáles son algunas maneras en la que puedes alimentarte de la Palabra de Dios junto con tu familia?