No se Trata de Ti

“No andamos predicando acerca de nosotros mismos. Predicamos que Jesucristo es Señor, y nosotros somos siervos de ustedes por causa de Jesús”. 2 Corintios 4:5 (NTV)

Entre más egocéntrica sea tu vida, más propenso eres al desánimo. Cuando crees que todo se trata de ti, te vuelves orgulloso, temeroso o amargado. Esos sentimientos siempre conducirán al desánimo porque te mantienen concentrado en ti mismo.

La Biblia dice en 2 Corintios 4:5: “No andamos predicando acerca de nosotros mismos. Predicamos que Jesucristo es Señor, y nosotros somos siervos de ustedes por causa de Jesús” (NTV).

¡No se trata de ti! Dios te puso en esta tierra, y tiene un mensaje que quiere declarar al mundo a través de ti. Pero tu mensaje de vida no es sobre ti. Se trata de Jesucristo.

Elegí esas cinco palabras —”No se trata de ti”— para comenzar Una Vida con Propósito porque ese es el mensaje más contracultural que podrías dar en el mundo de hoy. Casi todo en la sociedad (canciones, videojuegos, programas de televisión, noticias y anuncios) dice que primero debes pensar en ti mismo.

A veces desearía no haber puesto esa frase en el libro, porque no tenía idea de que por el resto de mi vida iba a ser constantemente probado con esa frase. ¡Tengo que repetírmelo a mí mismo 20 veces al día! Cuando alguien me alaba, me critica, me juzga mal o no está de acuerdo conmigo, tengo que recordarme: “No se trata de mí”. ¿Por qué? Porque cuando me concentre en mí, me voy a desanimar.

En cambio, como dice Pablo en el versículo de hoy, somos siervos por el bien de Jesús. Eso significa que estamos motivados para servir a los demás debido a lo que Jesús ha hecho por nosotros.

Dios siempre está más interesado en por qué estás haciendo lo que estás haciendo que en lo que realmente estás haciendo. Se preocupa por las motivaciones de tu corazón. El por qué haces algo siempre determina cuánto tiempo vas a hacerlo. Si te motiva la ambición egoísta, nunca será suficiente. Al final te desanimarás y lo dejarás.

Pero cuando estás motivado para hacer algo debido a la manera cómo eso anuncia el Evangelio y glorifica a Jesús, tendrás el aliento que necesitas para verlo realizado.

Reflexiona sobre esto:

  • ¿Cómo las personas más cercanas a ti te alientan a servir a los demás con una humildad semejante a la de Cristo?
  • ¿De qué manera el amor de Jesús por ti te motiva a pensar en los demás más de lo que piensas en ti mismo?
  • ¿Cómo Dios te anima cuando tienes la motivación correcta?
Si todavía no has confiado en Jesús y no te has comprometido a seguirlo, ¿por qué esperar más? Si estás listo para cruzar esa línea y tomar la decisión de creer en Jesucristo y seguirlo; haz esta oración.
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