¿Cómo Respondes a la Gracia?
por Rick Warren — Abril 7, 2022
La salvación es un don gratuito. Puedes obtener el perdón de todos tus pecados y obtener un boleto gratis al Cielo. Pero, si bien la salvación es gratuita para ti, también es costosa, porque alguien tuvo que pagar por ella. Cuando Jesús fue a la cruz, pagó el precio para que tus pecados fueran perdonados.
Si hubiera alguna otra forma de ir al Cielo, ¿no crees que Dios la habría usado? Si hubiera alguna otra forma para que un Dios santo dejara a una persona imperfecta en un lugar perfecto, ¿no crees que Dios lo habría hecho en lugar de sacrificar a su propio Hijo? Por supuesto que lo habría hecho.
Mucha psicología popular dice que puedes ir al Cielo siendo una buena persona o simplemente creyendo que Dios y el Cielo existen. Pero si eso es cierto, entonces ¿por qué tuvo que morir Jesús? No se habría sometido a ese tipo de agonía si no fuera necesario.
La verdad es que todos estamos llenos de pecado. Y un Dios perfecto no podría dejarte entrar en su hogar perfecto sin que se pague un precio enorme por ese pecado. Por eso no basta con ser una buena persona. De hecho, no existe una persona verdaderamente buena. La Biblia dice que nosotros, todos y cada uno de nosotros, no alcanzamos la santidad de Dios. ¡Por eso necesitas un Salvador!
Dios es santo y tu pecado es feo. La salvación de tu pecado es costosa, ¡le costó la vida a Jesús! ¿Cómo deberías responder a eso?
Necesitas apartarte de tu pecado y confiar en que Jesús te salvará. La Biblia dice: “Dios nos hace justos a sus ojos cuando ponemos nuestra fe en Jesucristo. Y eso es verdad para todo el que cree, sea quien fuere” Romanos 3:22 (NTV).
Puedes venir a Cristo “sin importar quién seas o lo que hayas hecho”. ¿No es eso lo más amable que te han ofrecido?
¿De qué estás más avergonzado en tu vida? Jesús pagó por ello. Puedes dejar de golpearte a ti mismo, porque Jesús permitió que lo golpearan por ello. ¡No tienes que pagar por algo por lo que ya pagó!
Aléjate de tu pecado hoy y confía en que Jesús ya lo pagó al ser tu sustituto en la cruz. ¡Está terminado! Eso es lo mucho que te ama Jesús.
Síguenos en Instagram & Facebook
Reflexiona sobre esto:
- Habla sobre cómo cambió tu vida cuando aceptaste a Jesús como tu Señor y Salvador.
- ¿Por qué necesitabas el don de la gracia de Dios?
No importa lo que hayas hecho o dónde hayas estado, tienes un lugar en la familia eterna de Dios listo y esperándote. La invitación está abierta de par en par. Solo cree y recibe.
¿Estás listo? Aquí hay una oración con la que puedes comenzar: “Querido Dios, sé que cuando muera, te daré cuenta de mi vida. Sé que he pecado contra ti y he vivido según mi plan, no el tuyo. Quiero que eso cambie, comenzando ahora mismo. Quiero apartarme de mis pecados y volverme hacia ti.
Gracias por enviar a Jesús a morir por todo lo que hice mal para no tener que pagar la pena. Sé que no merezco tu perdón. Sé que solo tu gracia puede salvarme, Señor. Nunca podría ser lo suficientemente bueno como para llegar a un lugar perfecto.
Jesús, gracias por amarme tanto que cargaste con toda mi culpa. Me hiciste aceptable para el Cielo y humildemente te pido que me salves. Yo creo en ti, Jesús. Y creo que mantendrás tu promesa de salvarme instantáneamente, por completo y eternamente. En el nombre de Jesús. Amén”.