Hay cosas que nuca aprenderás estando solo. Solamente las aprendes en comunidad. Crecer y desarrollar tu potencial, debes aprenderlo de otras personas.

Por ejemplo, solo puedes aprender a perdonar en relaciones. No puedes aprender eso estando solo. Solamente puedes aprender lealtad o amor en una relación. No puedes aprender amabilidad, fidelidad, generosidad o solidaridad sin otras personas.

De hecho, las cosas más importantes que necesitas aprender en la vida requieren estar relacionadas con otras personas. No puedes hacerlo solo. Si quieres desarrollar tu potencial, debes aprenderlo de otros.

¿Dónde es el mejor lugar para hacer eso? En la familia de Dios. En el Cuerpo de Cristo. En la iglesia.

Efesios 4:16 dice, “Él hace que todo el cuerpo encaje perfectamente. Y cada parte, al cumplir con su función específica, ayuda a que las demás se desarrollen, y entonces todo el cuerpo crece y está sano y lleno de amor” (NTV).  

Necesitas a las personas que Dios ha puesto en tu vida. ¡Y ellas te necesitan a ti! Dios nos programó para necesitarnos los unos a los otros y para aprender los unos de los otros, para poder convertirnos en las personas que Dios planeó que fuéramos.

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Reflexiona sobre esto:

• ¿Qué lecciones importantes has aprendido de tu grupo pequeño?
• ¿Por qué piensas que Dios nos diseñó para vivir y aprender en comunidad?
  ¿Qué te dice eso de la naturaleza de Dios?
• ¿Qué papel te dio Dios dentro de la iglesia? Si no lo sabes ¿qué pasos puedes tomar para descubrir cuál podría ser ese papel?