La oración, en sí misma, es un acto de fe.

Cuando te acercas a Dios en oración, es porque tienes fe en que Él responderá. A medida que enfocas tu atención en Dios, comienzas a ver que Él es más grande y poderoso que cualquiera de tus problemas, y esa comprensión aumentará tu fe porque comenzarás a creer que Él puede cumplir sus promesas. Y luego, cuando veas que Dios responde tus oraciones, tu fe se profundizará porque verás de primera mano que Él puede hacer lo que dice que puede hacer.

A medida que aprendes a orar con fe, un buen punto para comenzar es reclamar las promesas de Dios que se encuentran en la Biblia.

¿Sabías que hay más de 7.000 promesas en la Biblia? Estas promesas brindan la respuesta a todas tus necesidades y problemas. Y, cuando no estés seguro de qué orar, puedes usarlas para ayudar a dar palabras a tus oraciones.

A continuación, se muestra un ejemplo de cómo puedes usar una de las promesas de Dios como oración que fortalecerá tu fe.

Isaías 40:31 dice: “Pero los que esperan en el Señor renovarán sus fuerzas: emprenderán vuelo como si tuvieran alas de águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no desfallecerán” (NBV). Para usar esta promesa de Dios como una oración, puedes orar: “Dios, estoy tan cansado y desanimado. Siento que me rindo. Sin embargo, en fe, sé que renovarás mis fuerzas. Me levantarás y me darás nueva energía para que pueda seguir adelante. Mi esperanza está en ti. Gracias por ayudarme a avanzar y seguir adelante. Amén”.

Oraciones como esta ayudan a aumentar tu fe. Te recuerdan lo que Dios ha prometido; entonces ves en tu propia vida cómo Dios cumple sus promesas.

Aquí hay una lista de algunas de las promesas de Dios en la Biblia. Intenta orar algunas de ellas y observa cómo aumenta tu fe al ver que Dios cumple sus promesas.

• “El Señor da fuerzas al cansado, y aumenta el vigor del que desfallece”. Isaías 40:29 (RVC)
• “No tengas miedo, porque yo estoy contigo; no te desalientes, porque yo soy tu Dios. Te daré fuerzas y te ayudaré; te sostendré con mi mano derecha victoriosa”. Isaías 41:10 (NTV)
• “El Señor mismo peleará por ustedes. Solo quédense tranquilos”. Éxodo 14:14 (NTV).
• “Pero si confesamos a Dios nuestros pecados, él, que es fiel y justo, nos perdonará y nos limpiará de toda maldad”. 1 Juan 1:9 (NBV)
• “No tengas miedo porque el Señor irá delante de ti y estará contigo. Él no te desamparará. No temas ni te desanimes”. Deuteronomio 31:8 (NBV)
• “Así que mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús”. Filipenses 4:19 (NVI)
• “Aunque ande en valle de sombra de muerte no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo. Tu vara y tu cayado me infundirán aliento”. Salmo 23:4 (RVA-2015)
• “Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, Y grande en misericordia para con todos los que te invocan”. Salmo 86:5 (RVA)

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Reflexiona sobre esto:

A medida que te acostumbres a orar las promesas de Dios, puede resultarte de utilidad escribir tus oraciones. Elige una de las promesas del devocional de hoy y escribe una oración a Dios. Habla con Él sobre Su promesa. Dile que confías en Él para cumplir su promesa.

Aquí tienes un ejemplo:

La promesa de Dios 

“Si necesitan sabiduría, pídansela a nuestro generoso Dios, y él se la dará; no los reprenderá por pedirla” Santiago 1:5 (NTV).

Ejemplo de oración

“Padre, tantas veces me olvido de pedir lo que realmente necesito —y la sabiduría es una de mis mayores necesidades. Estoy muy agradecido por esta Escritura y la promesa que contiene. Gracias por ser tan generoso y dispuesto a darme la sabiduría que necesito en mis circunstancias diarias. Dios, quiero vivir según las promesas y los principios de tu Palabra, no según las normas del mundo. Enséñame a pedir sabiduría con valentía todos los días para que pueda navegar en la vida de acuerdo con tu voluntad y para tu gloria. Te lo pido en el precioso nombre de Jesús. Amén”.