Por salud mental, debes enfocar tu mente en las cosas correctas –incluyendo estas tres cosas específicas.

1. Piensa en Jesús.
   Todos hemos escuchado el dicho, “Te conviertes en lo que más piensas”. Si quieres ser más como Jesús, llena tus pensamientos con él. Hebreos 12:3 dice “Piensen en el ejemplo de Jesús. Mucha gente pecadora lo odió y lo hizo sufrir, pero él siguió adelante. Por eso, ustedes no deben rendirse ni desanimarse”. (TLA)
2. Piensa en otros.
   La Biblia dice en Filipenses 2:4 “Que cada uno no busque sólo su propio bien, sino el de los demás” (PDT). ¿Te das cuenta lo contra cultural que es eso? Todo en el mundo te enseña que debes pensar en ti mismo y nadie más. Pero Jesús fue contra cultural, y cuando piensas en él, más fácilmente pensarás en otros.
3. Piensa en la eternidad.
   “Ningún ojo ha visto, ningún oído ha escuchado, ninguna mente ha imaginado lo que Dios tiene preparado para quienes lo aman” (1 Corintios 2:9 NTV). Cuando comienzas a enfocarte en verdades como esas, todos tus problemas parecerán inferiores comparados con la gloria, la alegría y el placer de las cosas que tienes en la eternidad.

Tu mente es tu bien más valioso y también el campo de batalla más grande. Pídele a Dios que te ayude a tomar las decisiones cada día, para alimentarte con la Palabra de Dios, que libere tu mente de los pensamientos destructivos, y llene tu mente con Jesús, con la necesidad de pensar en otros y con la eternidad. Entonces habrás ganado la batalla.

Reflexiona sobre esto: